Resumen de información: ayudar a empresas zombies, necesidad pero riesgo futuro

Ayudas públicas
Ayudas públicas

La OCDE, al igual que otros analistas, ha elevado su previsión de crecimiento para España  ¿Quiere esto decir qué se despejan las incógnitas y los riesgos que pesan sobre la economía española? Parece que no.

El riesgo latente de una elevación de los casos de contagio de coronavirus, dada la extensión que están teniendo las nuevas variantes, especialmente la británica, a las que acompaña una mayor virulencia y, según algunos expertos, una menor eficacia de las vacunas es uno de los principales lastres.

Existe un enmascaramiento de la realidad empresarial de “empresas zombies” por el  respirador artificial de las subvenciones y la financiación pública

Los riesgos y las amenazas continúan con el posible enmascaramiento de la realidad empresarial que se está produciendo con las carencias y los sucesivos retrasos en los vencimientos de los créditos y de los avales ICO, e incluso de la obligatoriedad de declarar concurso de acreedores. En otras palabras, esta manteniéndose a muchas empresas, que ya empiezan a conocerse como “empresas zombies”, a base del respirador artificial de las subvenciones y la financiación pública sin que en un buen porcentaje de los casos eso vaya a lograr la supervivencia de dichas empresas cuando desaparezcan estas circunstancias y estos apoyos públicos, de lo que también ha alertado recientemente el Banco de España.

A ello se añade la ausencia de iniciativas en lo que se refiere a las reformas que nuestra economía necesita desde hace décadas y que, en parte debido al parón económico provocado por el COVID, y en parte a la orientación ideológica del actual Gobierno de coalición, se encuentran paralizadas e incluso orilladas, con medidas contradictorias con los objetivos que se deberían buscar.

Las ayudas que concederá la Unión Europea, siendo un balón de oxígeno imprescindible, podrían añadir un nuevo factor a este enmascaramiento de la realidad empresarial que se puede ver ampliado en el momento que las autoridades comunitarias decidan reducir estas ayudas.

Todo ello sin tener en cuenta otro factor el riesgo que puede ser el aumento de la inflación y de los tipos de interés a lo largo de 2021 y sobre todo de 2022.

Los bancos centrales, entre controlar la inflación y mantener estímulos

Los bancos centrales se debaten entre dar respuesta al repunte de inflación o a la necesidad de seguir apoyando e impulsando la economía. Los mayores rendimientos en los mercados de bonos y el anuncio de una elevación de los precios podrían llevar a un endurecimiento de la política monetaria y una elevación de los tipos de interés. Pero el desempleo y la persistente contracción económica obligarán a mantener  los estímulos durante bastantes meses.

El alza de tipos será ligero, no llegará al 1% en 3 años, aunque será signo de que las cosas están cambiando

La incógnita está en saber cuando se encontrarán estas dos tendencias contrarias y, por tanto, el momento en que se reducirán los estímulos y los programas de compras a la vez que un alza de los tipos. En todo caso, este alza será ligero, no llegará al 1% en los próximos tres años, aunque tendrá el valor de ser un signo de que las cosas están cambiando, que la economía comienza a mejorar y que se inicia un regreso hacia un estado más favorable en los ratios microeconómicos.

Los fondos de inversión en bonos verdes duplicaron en 2020 su volumen

Los fondos de inversión en bonos verdes duplicaron en 2020 su volumen hasta alcanzar los 20.000 millones de dólares convirtiéndose en uno de los ámbitos con mejor evolución y respuesta a la crisis del coronavirus y una expresión de la tendencia global al alza de la financiación sostenible, según informa Environmental Finance.

Esta favorable evolución de los fondos que invierten en este tipo de activos sostenibles se registró igualmente en 2019 cuando el volumen bajo gestión en fondos de bonos verdes pasó de los 6.000 millones de dólares de 2018 a los 10.000 millones de 2019, si bien se observa que el crecimiento se está acelerando en los últimos tiempos y podría seguir una tendencia similar en 2021.