Partiendo de que hemos dejado atrás en Europa el pico de la pandemia, las economías europeas reabren tentativamente, pero siguen presentes algunos riesgos, según S&P.
Para muchas empresas, el verano va a suponer un alivio, mejorando su situación, pero sin poder decir que han superado su situación crediticia, que puede provocarles una nueva sacudida en la última parte del año, en función de los plazos de repago o devolución de prestamos o ayudas.
Muchas empresas pueden sufrir una nueva sacudida crediticia en la última parte del año
Los riesgos a los que deberán atender las empresas europeas en los próximos meses, según el análisis de la agencia de rating americana, están encabezados por la amenaza de los rebrotes y un resurgimiento de la pandemia antes de que pueda disponerse de una vacuna; y pueden resumirse en:
-Un deterioro de los fundamentos crediticios a medida que la economía no llegue a su pleno rendimiento, con el consiguiente deterioro de la solvencia de empresas e instituciones;
-Las tensiones comerciales generales, no sólo entre China y Estados Unidos sino entre las diferentes áreas geográficas y económicas mundiales, particularmente por lo que se refiere a los tratados comerciales, incluido el de no lograrse un acuerdo de libre comercio entre Gran Bretaña y la Unión Europea para finales de esta año;
Tensiones comerciales ante la posibilidad de no lograrse un acuerdo de libre comercio entre Gran Bretaña y la Unión Europea para finales de esta año
-La incertidumbre y la inseguridad laboral, que frenan la recuperación del gasto de los consumidores;
Turismo y transporte aéreo pueden experimentar una travesía del desierto de varios años hasta recuperarse
-Cambios en las pautas y el comportamiento de estos consumidores que pueden afectar dramáticamente a sectores como el turismo y el transporte aéreo y otros, que pueden experimentar una travesía del desierto de varios años hasta recuperarse adecuadamente.