GFEwatch: Hacia el credit crunch (restricción de crédito) en el segundo trimestre

Resucita la amenaza del credit crunch
Resucita la amenaza del credit crunch

Hacia el credit crunch (restricción de crédito) en el segundo trimestre. Los bancos de la eurozona tienen previsto restringir de manera notable el acceso al crédito a las empresas en el segundo trimestre, ya que la guerra en Ucrania pesa sobre las perspectivas y reduce profundamente su tolerancia al riesgo, según mostró recientemente una encuesta del Banco Central Europeo.

Los bancos prevén un endurecimiento neto considerablemente mayor de las normas de crédito para los préstamos a las empresas, probablemente como reflejo del impacto económico indeterminado de la guerra en Ucrania y la anticipación de una política monetaria menos flexible”, dijo el BCE en una encuesta trimestral sobre préstamos. (Estrategias de Inversión).

Geoestrategia y tipos de interés, factores clave

Claves para un segundo trimestre superincierto, lleno de incógnitas y dificultades. Aqui tiene algunas claves para intentar navegar en este mar de aguas turbulentas en el que “la geoestrategia y los tipos de interés se convierten en los 2 factores clave”, según los analistas de Bankinter.

– Las estimaciones realizadas pierden vigencia y fiabilidad, pero aún no se dispone de otras que sí lo sean y reemplacen a las anteriores. Técnicamente, las primas de riesgo aplicables aumentan sin que sea posible determinar cuáles son los niveles adecuados. Pero lo que sí sabemos es que la mayoría de las referencias, más o menos fiables, que teníamos ya no sirven. Por tanto, debemos concentrar la atención en Ucrania/Rusia y en los tipos de interés, considerando todo lo demás como consecuencia o incluso algo accesorio de éstos. Sorprende la deportividad con que las bolsas están encajando este cambio de contexto.

– La herencia de la invasión de Ucrania consistirá, conceptualmente (no exacto cuantitativamente), la mitad de crecimiento, el doble de inflación y beneficios empresariales cuestionados. Esto, junto a tipos de interés superiores, no puede dar como resultado valoraciones más generosas, sino inferiores. Las bolsas aún no descuentan nada de esto, pero las valoraciones de compañías e índices se actualizarán a lo largo de abril y mayo… y entonces su reacción podría ser distinta, menos complaciente. El fin de los programas de compras de activos de la Fed (marzo) y el BCE (junio) no será neutral para las bolsas. El binomio riesgo/rentabilidad esperada se ha deteriorado notablemente, así que la correcta gestión del riesgo sigue siendo prioritaria. La protección debe anteponerse a la ambición, al menos durante algún tiempo.

La subida de tipos, antes de lo esperado

Los tipos de interés subirán más rápidamente de lo que se espera: Porque los bancos centrales se verán forzados a anteponer su deber de controlar los precios al de fomentar crecimiento y empleo. Sobre todo la Fed, porque actuará con más libertad puesto que el ciclo económico americano es robusto. Por eso seguirá adelante con más determinación de lo esperado subiendo tipos, ejerciendo así una influencia indirecta e ineludible sobre el BCE… que terminará aceptando subir un poco este mismo año, aunque probablemente sólo su tipo de depósito, que permanece en negativo desde 2014.

Resulta clave monitorizar la probable inversión de la curva de tipos americana 2-10 años. Ese spread o diferencial podría situarse en negativo enseguida. Históricamente los retrocesos significativos de Wall St. han tenido lugar precisamente justo después de que eso sucediera. Tipos al alza y spread 2-10 años en negativo actúan sobre las bolsas como la fuerza de la gravedad sobre los cuerpos, limitando cualquier avance serio. Y esto es así porque suele funcionar como una especie de alarma que avisa sobre una probable recesión o, al menos, una seria pérdida de impulso del ciclo económico y los beneficios empresariales.

Disminuye el potencial de revalorización de las Bolsas

-La democracia liberal saldrá reforzada de esta prueba y Europa más unida. Pero las consecuencias de corto plazo son ya tan irreversibles como fácilmente identificables: aún más inflación, reducción de los flujos comerciales, menos crecimiento, creación de empleo más débil y beneficios empresariales vulnerables. Este deterioro del contexto tendrá lugar incluso en el caso de que la guerra terminase inmediatamente. Por eso defendemos que, ante una incertidumbre superior que implica una prima de riesgo también superior en las valoraciones, éstas se verán revisadas inevitablemente a la baja y los potenciales de revalorización de las bolsas sustancialmente disminuidos. 

-Nuestras valoraciones de bolsas actualizadas bajo los nuevos parámetros ofrecen potenciales de revalorización modestos o incluso nulos. Por eso, mientras llega la oportunidad de volver a subir exposición a bolsas, seguimos anteponiendo la protección a la ambición y concentrando nuestras recomendaciones en Materias Primas, específicamente en Petroleras, Ciberseguridad, Infraestructuras, Defensa y, tal vez algo más adelante este año, selectivamente, Bancos. (Bankinter)