Las perspectivas favorables de la recuperación real que experimentan las economías mundiales puede ocultar la brecha que está produciéndose entre Europa y Estados Unidos, “por más que los problemas sean comunes, ya que las repuestas a ambos lados del Atlántico son diferentes, si no en el fondo, sí en la forma y, desde luego, en la rapidez de la ejecución” afirma Pedro del Pozo, director de inversiones financieras en Mutualidad de la Abogacía, entidad Miembro de OFISO. “La realidad es que estos pasos necesarios están avanzando muy por detrás de los implementados en EEUU”, sentencia el responsable de la inversión de esta institución.
Pese a a estas diferencias, Pedro del Pozo considera que “la economía mundial va muy bien con respecto a lo esperado hace un año” y que estamos ante “un contexto general positivo, aunque con las reservas lógicas por el momentum estacional”.
Las Bolsas lo detectan
Las diferencias más sobresalientes, según del Pozo, son las derivadas básicamente de la diferencia en la rapidez de respuesta, un de los grandes lastres de Europa y particularmente nuestro país respecto a la economía USA, y se detectan en la Bolsa con “la divergencia que se ha abierto entre EE. UU. y Europa: mientras las bolsas del viejo continente han mostrado bastante timidez, las bolsas estadounidenses siguen marcando máximos, sesión tras sesión.”
Del Pozo resalta asimismo la disparidad entre la Fed y el BCE: “mientras que éste último acaba de modificar sus postulados para permitir apoyar de manera más directa a la economía, la Reserva Federal estadounidense se plantea ya abiertamente el comienzo de la retirada de estímulos, el famoso “tapering””, comenta el experto. “Esto habla por sí mismo de hasta qué punto EEUU nos saca varias cabezas en la carrera de la normalización post-Coronavirus”, añade.
Como consecuencia de este gap las bolsas europeas pueden sufrir el desvío de no pocas inversiones globales hacia la bolsa americana con el consiguiente impacto negativo para los mercados de capitales de nuestro continente.
En todo caso “conviene recordar -añade- que aún queda mucho ejercicio y es más que probable que, de seguir así, la inflación vuelva a ser una preocupación para los inversores”.