Las finanzas integradas consisten básicamente en la fórmula mediante la que empresas no financieras ofrecen a sus clientes servicios financieros, mayoritariamente a través de dispositivos tecnológicos, centrados principalmente en los pagos. La consultora EY considera que el tamaño del mercado de las finanzas integradas globales en toda la cadena de valor crecerá de 264.000 millones de dólares en 2021 a 606.000 millones de dólares en 2025.

Con el potencial de desviar el 50% de los ingresos bancarios a otros proveedores, representa un desafío fundamental para los servicios financieros tradicionales, particularmente para los bancos aunque, paradójicamente, los bancos disponen de una posición de privilegio para liderar este proceso dada su relación estrecha y la confianza que tienen en ellos sus clientes.

Servicios financieros que acompañan la experiencia del cliente

La integración perfecta de los servicios financieros en la vida diaria de los clientes está entrando en una nueva era. Para muchos consumidores y empresas, las propuestas de servicios financieros son óptimas cuando se integran en un recorrido del cliente interconectado, en lugar de ofrecerse como una serie separada de interacciones que acompañan un recorrido, afirma EY

Los consumidores y las empresas esperan cada vez más que los productos y servicios financieros estén estrechamente integrados en sus actividades diarias, tanto en el modo de efectuar el pago como en el de u obtener financiación  en el punto de compra en tiempo real.

Los consumidores y las empresas esperan cada vez más que los productos y servicios financieros estén integrados en sus actividades diarias

Fundamentalmente, estas experiencias integradas van más allá de los “servicios financieros digitales” y, en cambio, nos están acercando a la próxima revolución financiera. Los servicios financieros se convertirán en un componente integrado de una experiencia de cadena de valor más amplia: los servicios financieros en la era de la experiencia, añade la consultora.

Aplicable a multitud de áreas y actividades

La experiencia del cliente se está convirtiendo en el factor determinante a la hora de reformular el modo de ofrecer los servicios financieros y es aplicable a multitud de áreas y actividades: viajes, restauración, turismo, peajes, estacionamiento y parkings, grandes almacenes y supermercados, eventos, estadios y lugares que acogen eventos, centros médicos, centros de ocio y recreativos, y asi, cuantas actividades se nos ocurran en la vida cotidiana de cualquier ciudadano.

Los bancos clásicos no pueden seguir basando principalmente su oferta sólo en los que acuden directamente a ellos para un servicio específico

Los bancos y las entidades financieras clásicas no pueden seguir basando principalmente su oferta de servicios financieros sólo con aquellas personas que acuden directamente a ellos en busca de un servicio específico, especialmente teniendo en cuenta que, cada vez con mayor frecuencia, los competidores estarán a su alcance justo cuando están a punto de realizar una compra, tal como señala Financial Brands.