Se acercan cinco años cruciales para la industria de valores

Desafíos para los responsables financieros

Las empresas y entidades en torno a la industria de valores y de custodia se encaminan hacia un futuro lleno de cambios y desafíos que cambiaran su fisonomía más que en las dos o tres últimas décadas: en especial, a automatización y la robótica, la analítica y big data, Blockchain y, en general, la irrupción de las fintech, según revela un análisis publicado por Mackinsey, realizado por Thorsten Ehinger y Promila Gurbuxani, consultores de esa firma, y Jonathan Klein y Matthias Voelkel, socios de la misma.

La cuenta de resultados de estas entidades en la última década no ha sido muy boyante. Han sufrido los efectos de la crisis con un débil crecimiento de los ingresos, apenas un 3% anual de media, lo que les ha obligado a una racionalización y contención de los costes para mantener su beneficio y en algunos casos sobrevivir.

El ciclo de crecimiento económico trae un respiro, aunque los ingresos provienen en su mayor parte del área asiática

El nuevo ciclo de crecimiento económico parece estar dando un respiro a estas entidades financieras, con un aumento de los precios de los activos, una mayor afluencia de los mismos, y una elevación prevista de los tipos de interés y de los márgenes, aunque los ingresos provienen en su mayor parte del área asiática, seguida de Estados Unidos y por detrás Europa.

“Por otra parte “las empresas están sintiendo presión sobre sus ingresos debido a una regulación más estricta y a los costos, debido a las preocupaciones de los clientes de los gestores de activos sobre sus propios resultados y la rentabilidad”, manifiesta el informe.

El alivio será notable en los servicios de custodia y sus ingresos, especialmente en los mercados asiáticos beneficiando a las empresas con una importante exposición asiática.

Características de los próximos cinco años

Según el informe de Mackinsey, la industria de valores se caracterizará en los próximos cinco años por:

– La introducción de la robótica y procesos automatizados, así como nuevos servicios en relación con información y datos, la gestión de riesgos y la información sobre procesos regulatorios, lo cual requerirá cuantiosas inversiones en analítica.

– Por su parte, esta automatización de los procesos traerá consigo una mayor eficiencia y ahorro de costes, estimados en 20.000 millones de dólares para el conjunto de la industria.

El ahorro que traerá la automatización de los procesos se estima en 20.000 millones de dólares

– Aumento de ingresos mediante la rentabilización de los enormes volúmenes de datos en poder de las entidades financieras que operan en la industria de valores.

– Aparición de jugadores potentes en cuanto a big data y analítica como prioridad estratégica, que les otorgan un conocimiento profundo de los mercados de valores, el comportamiento de los inversores, el análisis de riesgos y la regulación.

– Disminución de las fusiones y adquisiciones en esta industria de valores que se centraran en oportunidades regionales, especialmente en el área asiática y en menor medida en estados Unidos y Europa.

La industria se concentrará en pocas entidades globales: 4 tenían el 60% de los activos bajo custodia en 2017

– La industria en términos globales seguirá concentrada en un limitado número de entidades, como ocurrió ya en 2017, año en el que cuatro de estas entidades globales tenían el 60 por ciento de los activos totales bajo custodia.

– Avanzará el proceso de externalización de funciones no estratégicas o críticas.

– La regulación, que viene considerándose un aspecto fundamental en el entorno de la industria de valores, puede estar llegando a un estadio crítico con la nueva regulación sobre los Depositarios de Valores (CSDR) y la introducción del sistema TARGET2-Securities (T2S). Ambas iniciativas, señala el informe “crearán oportunidades para los custodios globales, pero plantearán desafíos para los custodios más pequeños y locales y los DCV, a menos que logren ajustar sus modelos de comercialización y su posicionamiento estratégico y se asocien con empresas más grandes”.

Blockchain no afectará a corto plazo a esta industria, aunque si en el medio y largo plazo

– El impacto de Blockchain en la industria de valores no afectará por sí solo a las operaciones centrales de esta industria, “al menos no a escala global en el corto plazo, ya que requeriría coordinación y amplia aceptación entre las empresas que tradicionalmente son competidoras, así como entre otros actores clave, como intermediarios, inversores y reguladores”, aunque reconoce el valor disruptivo de esta tecnología en el medio y largo plazo, y recomienda desarrollar una estrategia en ese terreno y analizar su impacto en los modelos tecnológicos.

– Las entidades que operan en la industria de valores pueden asumir un importante papel de custodios de criptomonedas, cuya capitalización a comienzos de marzo llegó a 355.000 millones de dólares.

– La industria de valores deben considerar a las fintechs como socios y no competidores. El informe revela que “más del 70 por ciento de las fintechs orientadas a los servicios de valores están desarrollando productos y servicios para los operadores tradicionales, en lugar de dirigirse a los clientes finales”.