El euro saca la cabeza y gana cuota en las reservas mundiales

Euro

El euro saca la cabeza al aumentar su uso en los movimientos internacionales de divisas y gana cuota en las reservas mundiales, con un aumento de 1,2 puntos porcentuales en 2018, según las conclusiones del último informe anual sobre El papel internacional del euro, publicado por el Banco Central Europeo (BCE).

Sin embargo, aunque también se fortaleció el papel de la moneda única europea durante 2018 y el comienzo de 2019 en los mercados primarios y en la emisión de deuda, el presidente del BCE ha enfatizado en” la necesidad de mayores esfuerzos para completar la UEM”.

Es necesario fortalecer más el euro

Por su parte, el miembro del Comité Ejecutivo del BCE Benoît Cœuré ha añadido que “se puede esperar que las políticas económicas sólidas y una UEM más profunda y completa aumente en última instancia el papel global del euro y también ayude a facilitar la transmisión fluida de la política monetaria a través de los mercados financieros de la zona del euro. En particular, debido a que los mercados de capitales en Europa todavía están fragmentados en ámbitos nacionales, y es necesario fortalecer aún más la capacidad del sector financiero para contribuir a la estabilización económica y la capacidad de recuperación en la zona del euro”.

Las políticas para una unión económica y monetaria más profunda son clave para apoyar un mayor aumento en el papel internacional del euro y revertir la tendencia a la baja que se venía registrando en los últimos años ya que, aunque nunca el euro ha alcanzado la posición de segunda moneda de reserva en el contexto mundial su decadencia se había agudizado tras la gran crisis financiera.

 

Fuente: BCE

El BCE considera que “el fortalecimiento de la calidad crediticia de la deuda pendiente, en particular mediante la aplicación de políticas fiscales sólidas y sostenibles, contribuiría a aumentar el suministro de deuda segura de la zona del euro y elevaría el atractivo mundial del euro. A más largo plazo, la creación de un activo seguro común de la zona del euro, si así lo deciden los Estados miembros, de una manera que no socave los incentivos para políticas fiscales nacionales sólidas, también podría contribuir a este objetivo”.