BBVA ha dado a conocer la evolución y resultado en los últimos meses y para 2019 del bono verde que emitió en 2018 y que ha contribuido a reducir la huella de carbono en 274.609 toneladas de CO2 en 2018 y estima otras 106.529 toneladas para 2019, generando 558 gigavatios/hora de energía eléctrica renovable.
El banco ha destinado los 1.000 millones de euros captados en los mercados mayoristas a la financiación de proyectos de energía renovable y transporte sostenible. Así consta en el primer informe de seguimiento de este bono que acaba de publicar el grupo.
BBVA publicó en abril de 2018 su marco para la emisión de bonos sostenibles, vinculado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y, en mayo del mismo año, emitió su primer bono verde por un importe de 1.000 millones de euros, la mayor emisión verde realizada por una entidad financiera de la eurozona hasta esa fecha.
La emisión registró una sobredemanda tres veces superior al importe final, lo que permitió bajar el precio a ‘midswap’ más 80 puntos básicos.
Según ha informado el banco en su primer informe de seguimiento de este bono verde, BBVA ha destinado los 1.000 millones de euros emitidos a la financiación de diversos proyectos de energía renovable y transporte sostenible. El reparto concreto de los 1.000 millones emitidos arroja una cifra de 775 millones para financiar proyectos de energía renovable (611,3 millones de euros a energía eólica; 154,9 millones a proyectos de energía solar, y 8,8 millones a proyectos de energía solar y biomasa) y 225 millones a proyectos de transporte sostenible.