La economía estadounidense muestra una aparente fortaleza con un PIB que crece a un ritmo acelerado y una productividad con señales positivas. gracias a la Inteligencia artificial que podría aortar hasta un 50% del crecimiento aunque se trata de un entorno de política económica incierta, donde las decisiones comerciales, migratorias y monetarias pueden amplificar desequilibrios en lugar de estabilizarlos, afirma en un análisis el banco de inversión alemán Berenberg.
¿Un espejismo tecnológico más que el inicio de un ciclo expansivo sólido?
La entidad muestra ciertas reservas por creer que este repunte económico estadounidense “podría ser más un espejismo tecnológico que el inicio de un ciclo expansivo sólido. Sin reformas estructurales que incentiven la inmigración cualificada, mejoren la previsibilidad regulatoria y coordinen política monetaria con la realidad productiva, es probable que el crecimiento retorne por debajo del 2 % interanual en los próximos años, y que el potencial de la IA quede parcialmente desaprovechado”.
Señales de estancamiento en el mercado laboral
El crecimiento del PIB real americano avanza con fuerza mientras el mercado laboral da señales de estancamiento. Tras un crecimiento moderado del 1,6 % anualizado en el primer semestre del año, la Reserva Federal de Atlanta proyecta un notable repunte del 3,8 % en el PIB real para el tercer trimestre, lo que elevaría la tasa interanual al 2,2 %, ligeramente por encima del 2,1 % del segundo trimestre. Sin embargo, este dinamismo no se refleja en la creación de empleo lo que sugiere un repunte de la productividad, aunque aún no está claro si se trata de un cambio estructural duradero o de un fenómeno transitorio.
La política económica de la administración Trump representa un riesgo latente para la sostenibilidad del crecimiento
En este contexto, la política económica de la administración Trump representa un riesgo latente para la sostenibilidad del crecimiento. Las tarifas arancelarias elevadas, la incertidumbre regulatoria y la política migratoria restrictiva pesan sobre las perspectivas a medio plazo. Se proyecta que el crecimiento del PIB real caerá por debajo del 2 % interanual en los próximos años, ya que los efectos negativos de estas políticas probablemente superarán los posibles incrementos de productividad derivados de la inteligencia artificial (IA).
La inteligencia artificial, protagonista, aporta la mitad del crecimiento
Berenberg asegura que “una parte sustancial del crecimiento económico reciente proviene de la inversión vinculada a la IA. Al analizar el gasto en centros de datos, software, equipos de procesamiento de información e I+D, y descontar el elevado componente importado de esta inversión, se estima que la IA contribuyó directamente a alrededor de un tercio del crecimiento del PIB en la primera mitad del año.
A ello se suma que la inversión en IA impulsó los mercados bursátiles, elevando el valor de los activos de los hogares —especialmente los de mayores ingresos— y reforzando así el consumo privado. Sumando efectos directos e indirectos, la IA explica aproximadamente la mitad del crecimiento del PIB en el primer semestre.
Política monetaria en terreno ambiguo: recortes con crecimiento elevado
Berenberg confía que la Reserva Federal añada a final de octubre una reducción de 25 puntos básicos a la bajada del mes pasado, en respuesta a la fragilidad de un mercado laboral caracterizado por “baja contratación y bajos despidos”, más que a una necesidad de estímulo de la actividad.
Este escenario podría traducirse en un aumento de los beneficios domésticos y, por extensión, en un impulso para las bolsas
Estos recortes de tipos en un entorno de crecimiento cercano al 4 % anualizado y con presiones inflacionarias crecientes derivadas de las tarifas y las restricciones migratorias podría generar un contexto de crecimiento nominal persistentemente elevado. Si los aranceles reducen solo marginalmente los márgenes empresariales, este escenario podría traducirse en un aumento sostenido de los beneficios nominales domésticos y, por extensión, en un nuevo impulso para las bolsas, concluye el banco alemán.